Calle Balmes 47 · Barcelona · Telf. 93 452 19 90

En el año 1984 recuperar la cocina tradicional catalana e implantarla en Barcelona era una acción casi revolucionaria, una búsqueda de las señas de identidad gastronomica que la estupidez y los menús turísticos estaban logrando borrar. L’Olivé abrió sus puertas en estas fechas como una “casa de comida seria y honesta”, según la definición de su creador, el señor Josep Olivé.
En los 25 años que han transcurrido han pasado muchas cosas, entre ellas el cambio de ubicación del establecimiento, desde el local original de la calle Muntaner al nuevo y amplio restaurante de Balmes, dónde ahora podemos probar los platos paradigmáticos del recetario catalán clásico, con un puesta al día consistente, únicamente, en el cuidado de las cocciones, de las frituras y en la buena calidad de la materia empleada. Celebrar estas bodas de plata con un estilo culinario determinado y bien logrado obliga a un homenaje a los dos chefs que han mantenido este criterio gastronomico por encima de modas y tendencias. Caso curioso en la restauración barcelonesa, Francesc Grau y Josep Balaguer se han mantenido todos estos años frente a los fogones de L’Olivé, lo que ha ayudado a estabilizar una oferta que tiene como referencias básicas platos de cuchara, como las albóndigas con sepia y guisantes, las sabrosas habas a la catalana o los canelones típicamente barceloneses, junto a otros más ligeros y delicados. Son tentaciones en las que hay que caer cada vez que en la memoria del gusto se encienda el deseo de unos buenos buñuelos de bacalao, de una brandada, o porque no, del bacalao esqueixat y de unas alubias de Santa Pau sofritas con cebolla y anchoas, tan bien sofritas que la anchoas se integran en las legumbres. Este entendimiento con las sartenes se aprecia en los perfectos sesos de cordero a la romana, un plato en vías de extinción que, por suerte, no desaparece de la carta de L’Olivé. Dentro del esfuerzo integrador de platos del recetario rural a un restaurante situado en Barcelona debemos tener presente los calçots, no los largos calçots a la brasa, a la moda de Valls, si no unos de dimensión urbana, fáciles de comer, sencillamente rebozados.
Al margen de los platos señalados, que son la base de mis banquetes en esta casa, también son inapelables los pies de cerdo crujientes, deshuesados, acompañados por una rica sanfaina, el bacalao a la llauna, que dicen los sabios debiera llamarse a la barcelonina. Inamovible durante estos 25 años el rapé al all cremat, ha sido el aporte de la cocina de los pescadores de Tarragona. Es un plato que responde con exactitud a la receta tradicional. Asimismo, el steak tartar resulta una concesión muy sabrosa a los gustos de la burguesía que construyó L’Example. Sus herederos que ahora viven en la cuadricula, siguen disfrutando con el tartar, la paella de carne y verduras del tiempo o de la clásica crema catalana.

L’Olivé
Calle Balmes 47
Tel: 93 452 19 90
Horarios:
De 13h a 16h
De 20h30 a 24h
Día de cierre:
Cerrado domingo noche
No fumadores
Precio aprox: 38 euros