· Vila Vilà 71 Tel: 93 441 30 89 Precio aprox: 25€ Parking frente al restaurante ( gratuito) Abierto todos los días del año.

Ser un clásico de la restauración es mucho más que detentar una lejana fecha de inauguración. Para merecer este titulo, es necesario, al margen de la tradición, una línea de cocina sin altibajos, y un local en el que las remodelaciones hayan aportado la comodidad imprescindible en nuestros días.
El restaurante Elche cumple todos estos requisitos. Fundado en 1959 por la familia Iborra, reunió, durante años a toda la farándula del Pararelo, que compartía espacio con los viajantes alicantinos que tenían en Barcelona una plaza fuerte donde vender juguetes y zapatos. Precisamente, esta parroquia exigía que los arroces fueran aun mas buenos que los que comían en la cuidad de Elche. Rápidamente, la fama de esta casa se expendio más allá de Barcelona, entre unos comensales dispuestos a decidirse ante un dilema acuciante: ¿es mejor una paella que un arroz negro?
Para resolver este dilema tendremos que ocupar las mesas de Elche en varias ocasiones, porque, bajo la dirección de Eduardo Iborra, resulta difícil decidir cual es el mas sabroso. Ahora, la carta plantea la posibilidad de probar medias raciones, una manera de compartir chipirones, jamón con pedigrí o calamares a la plancha. Así mismo, y si los fogones no están ocupados en su totalidad, podemos pedir arroz para uno. Evidentemente, cuando el restaurante esta lleno, la paella de marisco, la mixta, la de bacalao con ceps, o el arroz a banda con langostinos, es para dos. Si no se es arrocero estricto, o se tiene un apetito envidiable, tras el arroz, se puede pedir un rape, o un robadillo al horno, perfectamente bien resueltos.
Tras los calamares, y una novedosa fritura de verduras, he buscado el gusto tan preciso de un arroz negro de Elche, con abundantes alcachofas y sepia que sabe a sepia. Sigue siendo uno de los más logrados arroces negros de Catalunya. Para seguir la tradición, lo he acompañado con un vino de la centenaria bodega alicantina de Primitivo Quilez, que cuadra con el punto de buen aceite que debe tener esta receta, un plato del que nos sirven dos veces.
La carta de postres se ha enriquecido notablemente en este último año, ganando en creatividad. Un tocinillo de cielo con salsa helada y algodón de azúcar puede cerrar una comida en la que no debe faltar un chupito de anís Sys, otro clásico alicantino. La carta de agua ardientes otra novedad, contiene joyas como el armagnac Dartigalongue.

Miguel Sen

Elche
Tel: 93 441 30 89
Precio aprox: 25€
Vila Vilà 71
Parking frente al restaurante ( gratuito)
Abierto todos los días del año.