Buena Vista · BARCELONA 10 · Telf. 93 368 28 44
No es fácil encontrar un espacio diseñado siguiendo la estética de los restaurantes de categoría en el que se integre un equipo de sala y cocina con formación en establecimientos de renombre, sobre todo si el grupo humano se mueve sobre los 30 años de edad. En El Toc de Gràcia han conseguido trabajar, bajo la dirección de Carlos Alonso, responsable global del Toc, un grupo entusiasta que tiene a David Serrano como maître y somelier y a Xavier Rué como cocinero. El hecho de que todos lleven muchos años de oficio, a pesar de su juventud, da interés a un restaurante en el que los precios no se disparan, a pesar de que algunas de sus realizaciones contengan materias primeras de altura.
Dividido en dos comedores, en los que se aprecia la obra de la pintora Marta Juventeny, este Toc tiene un área con barra en el que se sirve un interesante menú, más una zona decorada en tonos oscuros, con una iluminación muy peculiar en la que se come a la carta. Como Xavier Rué es un chef que ha trabajado entre otros, en El Rincón de Diego, las enseñanzas de este chef estrellado se aprecian en la dimensión de las raciones, pensadas para apetitos poderosos. Su carta, breve y bien pensada, la podremos leer tras la siempre agradable cata de dos aceites, un Arbequino y un Picual andaluz denso y sabroso. Siguen los aperitivos en forma de mini tapas, en las que destaca un pequeño juego con el jamón ibérico como protagonista, para continuar mediante una serie de propuestas, gambas de Palamos, espardeñas a la andaluza, más un grupo de entrantes en el que cabe destacar una personal coca de vieiras con trufa de verano, cebolla caramelizadas y setas, “carreretes”, un plato delicado, una ensalada de bogavante con mandarina, puré de boniatos y germinados de cebolla, o una sepia cocinada como un mar y montaña, con codorniz, jamón ibérico y patata enmascarada. Un risotto, y unas alcachofas rellenas de butifarra de perol trufada, cierran un capitulo que tiene continuidad en dos bloques de cuatro platos inspirados en el mar y en la tierra .Del primero he probado con satisfacción el mar y montaña de mero y pollo de corral, de cocción ajustada y salsa ligera, aromática. Queda para otra ocasión el gallo de San Pedro, con rossinyols, alcachofas, espárragos y jugo de asado. Los platos de carne, muy trabajados por el chef Rué, plantean desde el más sencillo filete de buey con texturas de alcachofas a los muy personales envoltinis de ternera blanca, la espalda y pierna de cabrito rellena de Torta del Casar, o el pato mudo del Penedès en dos cocciones. Antes de este nuevo contacto, ya habremos memorizado el buen servicio del vino de esta casa, más el nombre propio de una botella, el Blanc de Roure de la bodega L’Olivera. Los postres mantienen el nivel, con una cesta de crema de almendras y manzana que recuerda el aroma de los pasteles del magreb.
Miguel Sen Octubre 2007
Este establecimiento ha cambiado de chef, estamos pendientes de una nueva visita.
Consultar la carta en la web
http://www.tocdegracia.com
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